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La escasez de lluvias ha llevado a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) a tomar medidas para enfrentar el bajo nivel de agua en la vía interoceánica. Desde ayer, domingo, se redujo a 32 el número de embarcaciones que atraviesan diariamente el canal, disminuyendo los ingresos clave para las arcas públicas y generando preocupaciones sobre el posible aumento del atasco marítimo.
Ante la falta de precipitaciones, medio centenar de embarcaciones ya esperaban su turno para atravesar el canal, iluminando el horizonte de la bahía de Panamá en el océano Pacífico. La restricción en el número de tránsitos diarios podría aumentar el tiempo de espera para algunos buques, especialmente aquellos que no obtengan una reserva, lo que podría generar desafíos logísticos y económicos para la industria marítima en la región.
El promedio diario de tránsito suele ser de entre 35 y 36 buques en condiciones normales, pero debido a la situación actual, la medida de reducir la cantidad de embarcaciones en tránsito se traduce en una disminución de entre 3 y 4 naves al día. La situación es especialmente delicada, ya que aunque hay agua, la capacidad para almacenarla es limitada, lo que complica la gestión del canal en medio de la sequía.
Los trabajadores del Canal de Panamá expresan preocupación por la situación, destacando la importancia de tomar medidas adecuadas para afrontar la escasez de lluvias y asegurar un funcionamiento eficiente del canal, un componente crítico del comercio marítimo mundial.
