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La situación de los pasajeros varados en Colombia y Perú por la crisis de la aerolínea Viva Air es cada vez más preocupante. Numerosos viajeros han pasado la noche en los aeropuertos a la espera de un vuelo que los lleve a su destino previsto, muchos durmiendo en el suelo debido a la falta de alojamiento adecuado.
La cancelación de los vuelos ha afectado a diversas ciudades colombianas, como Medellín, Cali, Barranquilla y la capital, Bogotá, donde se han registrado filas y personas alteradas que claman por una solución. Además, en los aeropuertos peruanos de Lima y Cusco también hay más de cien pasajeros bloqueados por la cancelación de sus itinerarios.
La aerolínea Viva Air anunció la suspensión de sus operaciones en medio de un proceso de insolvencia al que se acogió a comienzos de mes. Esta medida ha dejado a miles de viajeros en tierra y ha generado una crisis laboral en la compañía.
Ante esta situación, la Aeronáutica Civil de Colombia ha informado que las compañías Latam, Avianca y Satena suplirán los vuelos cancelados del 27 de febrero al 1 de marzo «de acuerdo a la disponibilidad de sillas, sin costo adicional». Asimismo, otras aerolíneas como Viva Aerobús, Volaris y Wingo han ofrecido tarifas especiales a los pasajeros con vuelos cancelados con destino a Ciudad de México y Cancún.
Viva Air, con un 15% del mercado colombiano y una filial en Perú, busca desde abril del año pasado que el gobierno dé el visto bueno a su integración con Avianca, la aerolínea más grande de Colombia con el 32% del mercado. Sin embargo, hasta ahora el proceso de integración no ha sido aprobado y la situación financiera de Viva Air se ha deteriorado.
